Kayla Unbehaun fue desaparecida en el 2017, y para reencontrarse con su familia y pasó algo extraordinario.
Desaparecida después de acampar
Kayla Unbehaun tenía 9 años de edad cuando fue secuestrada en el suburbio de South Elgin en Chicago, Illinois.
Pero no fueron personas desconocidas quienes cometieron el crimen, sino su propia madre: Heather Unbehaun, luego de que perdiera la custodia completa de la niña.
Pese a que el papá de Kayla, Ryan Iserka, quedara como el cuidador principal, a Heather se le permitieron visitas supervisadas, por lo que la sustracción de la niña resulta increíble.
Según Ryan, ambas se fueron a acampar para ya no regresar.
Reporte que surgió efecto
La recomendación de las autoridades que buscan desaparecidos es que se reporte lo más pronto posible si hay sospecha, ya que las primeras horas son esenciales para seguir su rastro. Al pasar los años, encontrar a alguien es casi imposible, incluso con la difusión del caso o de las fotografías de la víctima.
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Por eso, que un hombre reconociera a Kayla el pasado sábado en una tienda de Asheville, Carolina de Norte —900 kilómetros lejos de su padre— con su apariencia de adolescente es extraordinario. Él le informó al dependiente de la tienda lo que pasaba, y éste último fue quien llamó a la policía.
Finalmente, el héroe dijo que fue gracias a que vio a Kayla en “Misterios sin Resolver”, serie documental que presentó este caso penal en la reciente versión que produce Netflix.
Castigo para la criminal
Desde el 28 de julio de 2017, Heither Unbehaun tenía una orden de arresto por delito grave.
Pero este sábado, cuando por fin la encarcelaron, se le impuso una fianza de 250.000 dólares que terminó pagando.
Ahora está en libertad, aunque tendrá que comparecer ante el tribunal el próximo 11 de julio.
