A diferencia de años anteriores, la temática del MET Gala 2024 fue confusa, dando como resultado interpretaciones poco atinadas.
Código de vestimenta: lo efímero de la belleza
El Instituto del Vestido del Museo Metropolitano de Arte de Nueva York organiza la MET Gala como preámbulo a la inauguración de su exposición de primavera, la cual está ligada a la temática de la pasarela.
Este 2024, la exposición es “Sleeping Beauties: Reawakening Fashion” (Bellas durmientes: el despertar de la moda), y albergará 220 prendas históricas que tienen como característica principal que ya no pueden manipularse debido a su fragilidad.
El código de vestimenta para las celebridades fue “El jardín del tiempo”, un cuento de J. G. Ballard que tiene esta trama central:
Una pareja de condes se refugia en una villa donde todo es belleza y arte, pero una turba furiosa amenaza con destruirla. Para atrasar la tragedia, el conde arranca una a una las cristalinas flores del tiempo de su jardín.
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Tiempo, naturaleza y clásicos de la moda
Como era de esperarse, la gran mayoría usó cristales, flores y vestidos corte sirena.
Zendaya no se complicó y decidió inspirarse en elementos tangibles del cuento. Su primer vestido, diseñado por Maison Margiela Artisanal, incluía uvas, colibríes, plumas y vuelos en cascada.
Para el segundo, tomó la idea de reutilizar prendas hermosas y únicas: su vestido negro de larga cola se usó en la pasarela de Primavera 1996 de Givenchy Couture, mientras que el tocado floral es de la colección Primavera-Verano 2007 de Alexander McQueen.
Maison Margiela también vistió a Bad Bunny como una versión corrompida del conde, pues portaba un traje con decoración de flores negras.
Lamentablemente, lo que predominó en las celebridades hispanas fue la aburrida simpleza: Shakira con su vestido rojo abierto y de enormes mangas. Karol G con un vestido nude completo lleno de cristales. Eisa González con un escote de pétalos rosas. O Rosalía, con un vestido negro ceñido inspirado en el “cisne negro” de Christian Dior.