Fran Drescher, presidenta de la SAG-AFTRA, se apoyó en la legalidad para rechazar el dinero, pues la propuesta de Clooney, y de varios artistas de renombre más, no tenía ni pies ni cabeza.
Las estrellas desinformadas
George Clooney le contó al sitio Deadline que él y otros actores, entre ellos, Scarlett Johansson y Ben Affleck hablaron este martes con Fran para proponerle una oferta generosa, según ellos, para “encontrar formas de ayudar a cerrar la brecha en el pago a los actores”.
Pidieron que quitara el límite monetario —de un millón de dólares— de las cuotas sindicales para que ellos, los que ganan más dinero, pudieran aportar 150 millones en un lapso de tres años y destinarlos al plan médico de los trabajadores que menos ganan.
También, dijeron que ellos se pondrían al final de la lista cuando llegaran los pagos residuales para priorizar a los que menos ganan.
Sólo que a se les olvida que la huelga es para aumentar el porcentaje de esos residuos.
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Fran los rechaza con justa razón
Fran les agradeció por la muestra de apoyo, pero los rechazó porque, legalmente, en Estados Unidos sólo los empleadores pueden abonar al seguro médico y a las pensiones.
También dijo que todas las mejoras por las que están luchando se tienen que reflejar en un acuerdo. Esto para que los cambios sean duraderos y de verdad ayuden.
En mi opinión, que esto venga justo después de que los productores —entre este grupo de actores también hay intereses de productores— intimidaran a sus trabajadores al negarse a hacer más acuerdos, pone más presión a Drescher y a quienes defiende, pues ahora, ella queda como la persona que quiere extender la huelga.
Es más, a la mayoría de estos actores se les ha señalado de no estar en los mítines.
